Algunos termoplásticos como el polietileno y el polipropileno poseen bajas tensiones superficiales y superficies químicamente inertes, lo que provoca que las tintas de impresión tengan escasa o ninguna adherencia en ellos, en esos casos se debe aplicar un pretratamiento para aumentar la tensión superficial y posibilitar su adecuada impresión.
Son cuatro las formas de lograr este pretratamiento:
- Por flameado – Realizado durante la fabricación.
- Por efecto corona – Realizado durante la fabricación.
- Por ligantes – Realizado en taller antes de impresión
- Por ionización – Realizado en taller antes de impresión
El pretratamiento se puede realizar en el proceso de fabricación de plástico, tal como el efecto corona o ionización, o en el taller de impresión por flameado o uso de ligantes.
Tratamiento por flameado
El flameado consiste en exponer la superficie de un plástico a una llama rica en oxígeno, por un período de tiempo de 0,1 a 0,2 segundos.
La oxidación de la superficie no es permanente, dura de 8 a 12 horas, por lo que antes de ese período de tiempo debe ser aplicada la impresión. Para una nueva impresión, después del tiempo de 8 a 12 horas, se requiere de un nuevo flameado.
El flameado correcto no es simplemente calentar el envase con la llama, sino que en utilizar una llama oxidante muy rica en oxígeno, con una buena relación aire/gas, la llama de este tipo es de un azul-violeta intenso.
Una llama pobre en oxígeno, inadecuada paro flamear, se manifiesta por su color amarillo.
Los esporádicos tonos amarillos de una buena llama oxidante, indican suciedad del mechero proveniente del aceite del gas, esto se previene utilizando un filtro para el gas.
Como combustible se utiliza el gas licuado doméstico, excepto para el flameado de materiales brillantes como el polipropileno. Para mantener el brillo de esas superficies se utiliza el flameado con acetileno, manteniendo también una buena mezcla de aire/acetileno.
Tratamiento con ligantes
Por la aplicación de un ligante químico a la superficie del plástico se obtiene una superficie rugosa sobre la cual la tinta adhiere bien. Es necesario un presecado de la capa de ligante antes de imprimir. En algunos casos se advierte una variación de la textura y el brillo del material a causa de capa de ligante.
Este procedimiento es apropiado solo para muy cortos tirajes.
Comprobación del pretratamiento.
Son tres las maneras de comprobar si una superficie ha sido tratada correctamente:
A- Se sumerge el envase en agua, un tratamiento correcto mostrará una película de agua pareja y continua que cubre completamente la superficie, Un tratamiento inadecuado está dado por el rompimiento y recogimiento de esa película.
B- Trazando una línea con un lápiz especial de prueba, si el tratamiento es adecuado la tinta se mantiene estable, si no lo es la tinta se contrae.
C- Trazando una línea con un lápiz de pasta (bolígrafo) sobre un envase recién tratado, la línea se cubre apretadamente con cinta adhesiva transparente (scotch), al retirar de golpe la cinta la línea debe permanecer en el envase.